Expectativas económicas para el segundo semestre son muy “débiles”, señala Herken

Los datos adelantados del Banco Central del Paraguay (BCP) confirman la desolada situación económica que se está viviendo en el mercado paraguayo. Una caída consecutiva de la actividad económica y del consumo hace pensar en una muy difícil recuperación para esta segunda mitad del año, ya que las expectativas económicas son muy “débiles”.

Así lo resaltó el analista económico Pablo Herken durante el programa Info+ por canal GEN-Nación Media. Aseguró que si es que no se recupera el consumo, si no se protege el ingreso de la gente, si es que no hay una política más agresiva del Gobierno en términos de protección social, será muy difícil no tener dolor en esta segunda parte del año.

Hay que recordar que el Banco Central remarcó que a pesar de la retracción del primer trimestre, que fue de 2,0%, y de resultados negativos en indicadores, para el segundo semestre el panorama podría mejorar y eso llevaría a un crecimiento del PIB estimado en 0,2%. Este fin de mes la banca matriz tendrá que rectificar a ratificar su pronóstico.

“Las expectativas son de que la segunda mitad del año no será tan fea como la primera, pero son flojas las expectativas, hay mayor incertidumbre con un mercado internacional con demasiadas luces rojas proyectando todavía un peor escenario”, especificó.

En ese sentido, remarcó que este miércoles fue un muy mal día a nivel internacional, ya que se dio a conocer un resultado de inflación muy elevado para EEUU, la mayor en 41 años, con menor crecimiento y con un dólar fortalecido. “Eso lleva a suponer que la Fed subirá sus tasas de una manera importante este mes, lo que encarecerá los créditos, emisión y tasas de bonos, y habrá fuga de dólares hacia mercados más seguros”, dijo.

Se requiere política consistente

Remarcó que esta combinación requiere una política más consistente para que en el corto plazo no duela tanto, pero el Estado está sin recursos, donde el presidente de la República está en otro mundo, ya que para él no existe crisis económica. “Tiene una desconsideración importante hacia el dolor de la gente, lo que es una situación que no hubiésemos querido tener”, enfatizó.

En ese marco, Herken indicó que, en esta coyuntura, hay que “apretarse el cinturón”, ya con una perspectiva muy dura con respecto a lo que se va a venir en el segundo semestre, aunque duela decirlo. “Cuidado con las perspectivas del 2023, ya que a nivel mundial y local son desfavorables”, aseguró.

Ajustes

Se deben hacer ajustes, como lo hacen ya otros países, manifestó. “No es una crisis de un año, es de un periodo determinado y bastante extenso en donde vamos a estar en escenario bastante crítico”, sostuvo.

Por otro lado, remarcó que lo que el Gobierno entregó al público en general fue verdaderamente una vergüenza. “El impacto que tuvo en casi todos los sectores, la palabra fue insuficiente. Falta mucho más, desde sectores industriales hasta la gente, quedaron descolocados con un listado de repetición de medidas que se extiende hasta casi como una libreta de almacén. Eso no es para enfrentar una crisis de manera mayúscula”, mencionó. LA NACION